Viendo a Gardel en las Islas Canarias

Mientras el 7 de octubre de 1933 Carlos Gardel cantaba generosamente para los asilados del instituro “Fermín Ferreyra” en Montevideo y seis días más tarde grababa en “Odeon”, el día 11 el cine “Numancia” de Santa Cruz de Tenerife anunciaba en el diario “La Prensa” las películas que se exhibirían en la temporada 1933-1934.

Dicha temporada comenzaría el 1° de noviembre con la proyección de “Esperame”, filme protagonizado por Gardel, Goyita Herrero y Lolita Benavente, donde el querido cantor emocionara con la interpretación de la rumba “Por tus ojos negros” (Don Aspizaú, Alfredo Le Pera y Cesar Lenzi), la zamba “Criollita de mis ensueños” y los tangos “Me da pena confesarlo” y “Estudiante”, los tres últimos de autoría de Gardel, Le Pera y Mario Battistella.

Los santacruceros podrían ver y oír también a Gardel en “Melodía de arrabal” –anunciada como superior a “Las luces de Buenos Aires” y “La casa es seria”-, película que el “Zorzal criollo” coprotagonizara con su compatriota Imperio Argentina, quien a su vez se mostraría en el filme “Buenos días”.

Cabe destacar que tanto “Melodía de arrabal” como “Esperame”, ocupaban un lugar destacado entre las películas de la temporada, detrás de “El signo de la cruz”, con un multiestelar elenco encabezado por Fredrik March, Claudette Colbert, Charles Laughton y “El cantar de los cantares” y “La Venus rubia”, protagonizadas por Marlene Dietrich las dos últimas.

Al mismo tiempo, ambas películas de Gardel son consideradas más importantes que otras cintas, como “Adiós a las armas”, basada en la novela de Ernest Hemingway, protagonizada por Gary Cooper; “El águila y el halcón”, con la actuación de, Fredrik March, Cary Grant, Carole Lombard y Jack Oakie;  “Reina el amor”, también con Fredrik March; “Madame Butterfly”, basada en la ópera de Giacomo Puccini, con Cary Grant y Sylvia Sidney; “Ondas musicales”, con Bing Crosby y George Burns; “El infierno de Verdún” reproduciendo la mayor y más larga batalla de la primera guerra mundial entre alemanes y franceses; y “Los nibelungos”, basada en las leyendas alemanas de las criaturas que habitan la niebla, entre otras.